A cualquier persona que les haya tocado un sorteo por internet y no sepa que hacer, ir Bangkok puede ser una buena idea.

Una ciudad de más de 8 millones de personas que ha asumido en las dos últimas décadas un frenético impulso hacia la modernidad más vanguardista con sus impresionantes rascacielos y sus hoteles de última generación, convirtiéndose en una ciudad influyente en el sudeste asiático y en un polo turístico de gran relevancia sin olvidarse de su esplendido pasado. Se podría decir que se asemeja a Londres, pero sin el transporte público.

Hoy por hoy Tailandia es uno de los destinos turísticos que más están de moda y Bangkok al ser su capital es una para más que obligatoria, sobre todo si a uno le ha tocado algún premio en concursos gratis.

El clima de Bangkok es húmedo y unas temperaturas que oscilan de los los 27 ºC y los 30 ºC, siendo la mejor época del año para visitarla los mees que van de noviembre a enero, pues la temperatura es más templada. Si se va en los meses de abril y mayo es posible pasar muchísimo calor, mientras que la época de los monzones son de junio a octubre.

La ciudad está llena de ambientes exóticos, diversos y contradictorios entre sí. Tiene cientos de mercados invadiendo la ciudad, siendo el más famoso el mercado Chatuchak, enorme y uno de los mercados al aire libre más grandes del mundo, en los que es muy común pararse a degustar las especialidades culinarias tailandesas, múltiples y coloridos templos budistas, y un sinfín de bulliciosas y caóticas calles llenas de vida.

Para bien o para mal Bangkok está pensada para los coches, es una ciudad algo incómoda para el peatón, por suerte los precios de los taxis son bastante baratos, el idioma puede ser un problema, pero poco a poco hay más taxistas que saben hablar inglés, hay que vigilar que conecte el taxímetro, como en todas partes del mundo los taxistas siempre buscan ganarse un dinero extra a costa del turista despistado.

Otra forma de moverse y quizás la más recomendable cuando se viaja hasta Bangkok es navegando por el río Chao Phraya a través de sus canales o usando el Skytrain, un tren elevado que pasa por el centro de la ciudad ofreciendo unas magnificas vistas de la ciudad, muy recomendable para los turistas.
Puede que tras unos días en Bangok, yendo arriba y abajo, visitando los templos, palacios, como el Gran Palacio, un gran complejo lleno de colores donde el dorado destaca sobre todos los demás, comprando y regateando en los mercados, comiendo a precios irrisorios en los puestos callejeros de comida que hay en todas partes y a todas horas, el cuerpo se resiente, pues gracias a concursos gratis es posible ir a tomar unos masajes tailandeses en Wat Po, pero cuidado pues los masajes tailandeses no son lo relajantes que uno piensa, sino que estrujan todas las partes del cuerpo sin piedad y sin pasión.

Uno de los barrios a los que el turista debe ir es al Barrio Chino de Bangkok. Un distrito creado en 1782 con muchísimas calles peatonales y estrechas, que aglutinan infinidad de tiendas para explorar, donde las aceras se convierten en improvisados mercadillos en los que cientos de chino-tailandeses venden cualquier producto que uno se pueda imaginar.

Por otro lado, los que no pueden ir a una ciudad sin conocer su cara nocturna es recomendable que vayan al Pat Pong, conocido como Barrio rojo, es la zona de diversión nocturna por excelencia.

Para alojarse nada mejor que ir al Hotel Oriental de Bangkok, con un sorteo por internet es muy fácil, considerado uno de los mejores hoteles mundo y disfrutar de las magníficas vistas sobre el río Chao Phraya.

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