Proponemos un viaje diferente para los más atrevidos. Una manera distinta de hacer turismo. O mejor dicho, cómo hacer turismo y tener acción. ¿Sabes de qué hablamos? Kayak en la Costa Brava. Allí encontraremos un buen número de travesías que nos harán disfrutar de la brisa marina a la vez que practicamos deporte y conocemos lugares preciosos.

Desde luego es una experiencia única e inolvidable de la que todos pueden tomar parte ya que no es necesaria una condición física excepcional. Lo indispensable es tener ilusión y ganas de descubrir otras alternativas a las rutas originales por las que vamos haciendo turismo.

El kayak, como parte del turismo activo, esto es, aquél en el que realizan actividades en áreas naturales, ha tenido un incremento de practicantes debido a multitud de razones que vienen desde la necesidad de tener nuevas experiencias, a disfrutar de espacios abiertos o retomar la relación con el deporte. Para muchos es hasta más importante la acción que el mismo lugar donde se va a montar en el kayak, es decir, que con sea un viaje, digámosle especial, da igual el sitio al que se vaya.

Claves para una buena travesía en kayak

Elegir el kayak adecuado es muy importante ya que a veces se da la vuelta, así que cuanto más ancha mejor. En cuanto al remo, si lo vamos a comprar buscaremos uno de buena calidad y ligero, así el movimiento será menos costoso para nuestro cuerpo.

Debes llevar siempre un chaleco salvavidas. Cualquiera puede cansarse o tener un accidente. ¡Y llévalo puesto! Si piensas que pareces tonto, tonto serás de verdad como te ahogues por no llevarlo. Más vale prevenir que curar, ¡así que póntelo!

Lleva siempre un par de litros de agua contigo y algo de comida que te reactive las energías y que no ocupen demasiado espacio.

Y por supuesto tenemos que comprobar el tiempo. Un buen trayecto en Kayak se puede estropear si nos cae una tormenta porque se pueden originar olas muy peligrosas… Con lo que volvemos a recalcar la necesidad de llevar puesto el chaleco salvavidas.

Dónde dormir durante el viaje

Todo depende de varios factores, como las preferencias personales, el presupuesto con el que contamos o los destinos donde vayamos a pasar la noche.

Si lo que realmente estás buscando es aventura te recomendamos que pernoctes allá donde te lleve la marea. ¿Te imaginas despertar con los primeros rayos del sol en una cala desierta? ¿Que sea la marea la canción de cuna que te acueste? Es algo digno de experimentar y muy apropiado para este tipo de viaje. La sensación de estar en armonía con la naturaleza, la relajación psicológica y la diversión serán parte de un recuerdo imborrable.

A veces no se permite pernoctar libremente, es una noticia que rompe nuestras recién estrenadas ilusiones, ¿verdad? Pero no tiene porqué ser así, seguimos teniendo propuestas para intercambiar y mejorar este viaje. La solución perfecta es ir a un camping. Nos llevamos una tienda, una esterilla, un saco y listo. Lo ideal sería que probáramos que unos días antes cómo vamos a colocarlo todo en la embarcación. Malo sería que llegara el día de iniciar la travesía y nos encontráramos con que la tienda no entra, la esterilla se sale y el saco se queda colgado y hundido en el agua.

Ideas para hacer una ruta

Hemos mirado y remirado las guías para encontrarnos con Transbrava. Esta empresa se pone manos a la obra para ofrecernos rutas en kayak por la Costa Brava que nos van a enamorar.

La Transbrava es su icono y nos lleva durante cuatro días desde Blanes hasta Empúries. Calas, cuevas marinas, bosques de pinos sobre el mismo mar… Y con la seguridad, sobre todo si somos nuevos, de que no vamos solos ni quedaremos a la deriva.

Ojo, que si uno no se ve capaz de aguantar cuatro días o que, simplemente, no quiere pasar tantos días de sus vacaciones sobre el kayak, puede elegir una mini travesía y pasar la mañana remando y descubriendo el otro punto de vista de un viaje maravilloso.

¿Y una nocturna? Suena romántico, emocionante y hasta parece que escuchamos una suave música de piano acompañando al sonido de la marea.

Una última razón…

¿Sólo una? ¡Podemos darte decenas! Nos conformaremos con las que sabemos que te van a llevar a buscar una travesía:

La diversión está asegurada, haga frío o calor, disfrutarás y desearás repetir.

Haces ejercicio sin sufrir, sin exigirte un esfuerzo físico desmesurado.

Puedes ir con tu familia, con los amigos o con la pareja. Es un deporte apto para cualquiera.

Te acercas más a la naturaleza, notarás como tus pulmones respiran con una paz deliciosa.

Cuando todo termine te sentirás completamente relajado. Lo único que pasará por tu mente son tus fechas disponibles en tu calendario para poder repetir.

Fuente imágenes: Pixabay y Wikimedia.