Sant Jordi, una de las festividades más emblemáticas de Cataluña

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La fiesta de San Jordi es un día muy popular en la Comunidad de Cataluña en la que los libros, las rosas y las gentes invaden las calles. Pese a tratarse de una celebración sin grandes espectáculos es una de las más conocidas y apreciadas ya no solo en la región, si no también en el resto de España. Los orígenes de San Jordi son la típica historia medieval que incluye princesas, caballeros y dragones y que, pese a ser tan común, no deja de ser sumamente especial y entrañable. Según la leyenda, en Capadocia, aunque el lugar cambia según de donde proceda el que la cuente, había un dragón que atacaba a un reino. Al principio el temor hizo que las gentes entregaran a la bestia dos corderos con los que apaciguar su hambre y evitar que hiciera mayores daños. Sin embargo, pronto comenzaron a escasear los animales y se decidió que el azar seleccionara a una persona del reino que ocupara el lugar de uno de los corderos.  Desde este punto existen dos versiones de la historia: una que afirma que  el pueblo, cansado de que nunca saliera en el sorteo ningún miembro de la realeza, exigió que se entregara al dragón la princesa; y otra historias dicen que fue la suerte la que hizo que le tocará a la princesa ser la próxima acompañante del cordero en las fauces del dragón. De una forma u otra, la princesa fue conducida a la cueva de la bestia y por el camino se encontró a un atractivo caballero, Jorge. Él se enfrentó al dragón y consiguió darle muerte hundiendo su espada entre sus escamas; rescatando así a la princesa y con ello, salvando al pueblo del hambre feroz del dragón. De la sangre que salió de la herida que Jorge le había provocado al dragón nació una única rosa roja que cogió el caballero y se la ofreció a la princesa.

Saint Jordi

Como agradecimiento, el rey quiso cubrir a Jorge de riquezas, pero el caballero le pidió que las repartiera entre los habitantes del reino. Se construyó una iglesia en nombre del héroe de la que, según contaban, brotaba una milagrosa agua que era capaz de curar a los enfermos. Ahora bien, a día de hoy resulta sumamente complicado indicar cuál fue la fecha concreta en la que se comenzó a regalar rosas en el día de San Jordi; algunos apuntan a que la tradición de regalar una rosa a una mujer se remonta al siglo XV y se relaciona con la Feria de las Rosas celebrada en Barcelona en aquella época.  Para muchos otros San Jordi es el resultado de una mezcla de costumbres y tradiciones a lo largo de los siglos. Sea como fuere, este sencillo festejo consta de un ritual en el que la gente sale a pasear, compra un libro o una rosa y se lo regala a aquellas personas más queridas.

Aunque no es un día festivo, sí que es una fiesta muy concurrida y llamativa y donde, quizá, sea más llamativa sea en las ramblas de Barcelona, pues la Ciudad Condal se llena de personas y puestos de libros en los que, con un poco de suerte, podrás encontrar a tu autor favorito dispuesto a firmarte alguna de sus obras.  Además, también se suelen organizar actividades en las bibliotecas y los centros culturales, así como algunos conciertos. Un perfecto 23 de abril. Un paseo ideal por Cataluña, hazte la maleta y pasa el día disfrutando del aroma de las rosas y la pasión de los libros. ¿Ganas de viajar incrementándose? Participa en este concurso y gana el premio con el que podrás hacer el viajecito que quieras.  Y que la misma suerte que acompañó a la princesa al encontrarse al caballero Jorge te acompañe a ti y ganes.

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